25 diciembre 2021

Los pimientos rojos son humanos ajados


Los pimientos rojos se quedan sequitos tras el paso del aire por sus caras. Se van arrugando, pierden la carne, les aparecen manchas y se encogen y tuercen. Lo sabemos todos.

Lo que no me habían dicho a mi… ya perdonaréis…, es que me iba a ir convirtiendo en un pimiento rojo con el rabo seco y sin color. Y que me iban a dejar colgado en una pared esperando que me quede “pa ya”. 

¿Para qué coño me han puesto el enchufe a mi vera? ¿Por si paso frío y me quiero poner la estufa?