24 julio 2020

Éramos polvo con forma de hoja apagada

Todo se volvió gris, apagado. Se había escapado la luz. 

Quedaron flotando los grises, los ocres tostados, algunos verdes botella, los amarillos sucios y el negro. 

Siempre el negro queriendo taparlo todo. 

Y nos fuimos encogiendo sobre nosotras mismas, esperando al viento. Pero no vino.

Nunca caímos al pudridero y nos mantuvimos como erguidas, creyendo que estábamos vivas.

Un golpe de agua de verano nos hizo caer pero antes de llegar al suelo, ya estábamos polvo.