No siempre podemos razonar o entender lo que vemos.
Una suma con más de 50 años a sus espaldas es una suma imposible.
¿Qué pretendía sumar el que dejó escrito aquello?
Ya nunca lo sabremos.
Esta suma no es legible pues no se puede razonar.
Son simples números vacíos.
No sabemos qué suma, para qué se quiere la suma.
¿Hay algo más en ella?
No. Por eso se nos van las gentes.