El cadáver de la muerte joven, los restos, la mirada muerta, la soledad.
Era sencillamente una vaca muerta hasta que la devoraron. Más o menos como hacemos ahora con la parte de la sociedad que se deja.
Parecía joven pues sus herramientas son pequeñas y limpias, pero la muerte no siempre entiende de edad y ataca la debilidad, la poca defensa.
Se acurrucó entre las piedras buscando una posición fetal entre ellas y allí se quedó el invierno.